Vino, néctar de dioses, bebida única y sofisticada; nos encanta. Todo el mundo se ve más elegante con una copa en la mano. Pero bastan unos segundos para dejarnos en evidencia, ¿sabemos realmente beber vino? Este artículo va para los que tienen dominado el “brindar y apoyar”, pero les gustaría entender un poco más este fantástico mundo y, por qué no, descubrir algún truco muy interesante para dejar a más de uno impresionado.
Hoy vamos a hablaros de los 9 errores más típicos que cometemos al beber vino y de cómo evitarlos. Se trata de consejos muy sencillos que ¡os harán parecer auténticos expertos!
1. Temperatura del vino
Empezamos con una de las cuestiones que crea más confusión: la temperatura. Se trata de un factor clave, capaz de alterar por completo el sabor del vino. Para dar con la temperatura ideal hay que tener en cuenta múltiples cuestiones como la acidez, el dulzor, el tipo de vino, la crianza en barrica…
Entonces, ¿cómo podemos saber la temperatura perfecta? Pues bien, cada vino es un mundo, pero hay unas reglas orientativas que os pueden servir de gran ayuda, recordad:
El espumoso se toma muy frío (entre 6 y 8º), el blanco y el rosado simplemente frío (entre 8y 12 °) y el tinto a una temperatura media (entre 12 y 16 °).
Si queréis que hagamos un artículo profundizando en este tema y explicando temperaturas más concretas para diferentes vinos, escribidnos y lo haremos encantados.
2. Hielo en la copa
Esto es muy típico cuando ya nos hemos saltado el punto 1 (la temperatura). De perdidos ¡al hielo! Gran error. Todos sabemos cómo acaba esta historia, con el cubo derretido en la copa y alterando todo su sabor. Si no os gusta el vino con agua, evitad los hielos.
3. La forma de coger la copa de vino
Esta es una manera rápida e infalible de ver quién es un auténtico amante del vino. Cuando sujetamos la copa por el cáliz, aunque puede ser más cómodo, estamos calentándolo (no hace falta que volvamos a insistir con el tema de la temperatura). Se trata de preservar el sabor todo lo posible, así que os animamos a sujetar la copa por el fuste o tallo y, a ser posible, con las yemas de los dedos. Además de cumplir una de las reglas básicas, derrocharéis elegancia y disfrutaréis más del vino.
4. Brindar por…
No, no os vamos a decir los motivos del brindis, eso lo dejamos a vuestra imaginación. Pero, si vais a chocar copas, aseguraos de hacerlo por la base del cáliz y no por la parte superior. Así no se romperá tan fácilmente (sobre todo si hay un exceso de entusiasmo) y no habrá que interrumpir la celebración. ¡Por seguir disfrutando!
5. Copa llena
Aunque nos guste mucho, las copas de vino no se llenan hasta arriba, sino a medias. ¿Por qué? Simplemente para que el vino “respire”.
6. Servir en una copa húmeda
Es frecuente utilizar copas recién lavadas (queremos que todo esté a punto y perfecto). En ese caso, es importante secarlas bien, para que el agua no altere su sabor. Es una versión, en menor escala, del punto 2 “hielo en la copa”.
7. Empujar el corcho
Cuántas veces estamos intentando abrir una botella de vino que se nos resiste y, hartos, presionamos hacia el interior el corcho. ¡Prohibido! Esto hará que el sabor se corrompa y no podremos disfrutarlo igual. Así que paciencia y mucho mimo a la hora de descorchar.
8. Servir distintos vinos en la misma copa
¿Quién no ha utilizado la misma copa para diferentes bebidas alguna vez? Y es que, aunque parece evidente, es uno de los errores más frecuentes. Para poder continuar con este reciclaje os damos un pequeño truco: enjuagar la copa con unas gotas del próximo vino que vayáis a servir. Así la vamos preparando sin alterar su sabor.
9. Servir en vaso
Es una forma estupenda de que pierda muchas de sus propiedades. Las copas están diseñadas para potenciar los matices y cualidades de cada vino. De hecho, podéis visitar nuestra infografía en redes sociales, donde os explicamos algunas de las diferencias más interesantes.
Esperamos que os haya gustado el artículo. ¿Conocéis más errores al tomar vino? ¿De qué temas os gustaría que habláramos? Podéis seguirnos, estar al tanto de novedades y consultarnos cualquier duda a través de nuestras redes sociales: Facebook e Instagram.
Gracias y ¡a aprender de los errores!
